top of page

De la identidad a la imagen, según Joan Costa

  • Foto del escritor: 4eco
    4eco
  • 26 ene 2021
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 28 ene 2021

Realizado por Noemí Sánchez Román

Este texto de Joan Costa habla de la transformación de la imagen de una empresa, de su evolución, que además, ha pasado a convertirse en estrategia, objetivo y algo de lo más importante a evaluar dentro de ella.

Es un proceso que aparece en la mente del público. Este comienza a través de percepciones y de experiencias sufridas por el usuario.

Por otro lado, la misma marca también emite sus propios signos hacia el exterior, le guste o no a esta, tiene una visión externa que le puede tanto beneficiar como perjudicar, depende de los valores que emita y sus receptores tomen de forma involuntaria. Esto lleva a que la imagen de la empresa favorece a esta cuando es reconocida y valorada.


La empresa ha de definir y construir estratégicamente, y controlar, su propia imagen. Por mucho que esta la tenga controlada, no podrá evitar que el público cree una imagen en algunas ocasiones diferente a la que han querido mostrar.

Es imposible ser una empresa y no emitir constantemente sus señales de identidad: “estoy aquí, soy yo, hago esto, te ofrezco esto otro...” Es por eso justamente que la imagen es un valor estratégico, un intangible que debe ser dirigido y controlado.


La identidad en su sentido siempre estratégico solo es posible para las empresas cuyas estructuras son adaptables. Las buenas estructuras son las organizaciones fluidas, flexibles, descentralizadas.


Un ejemplo de identidad a imagen de marca aparece en la empresa Winter Milk.



La base del posicionamiento de la cadena mexicana de cafeterías con helados artesanales es el uso de ingredientes naturales. La identidad está diseñada al estilo de los años 60. Los sentimientos nostálgicos evocan asociaciones con viajes familiares a una heladería, productos de calidad, humor ligero y despreocupado.

Fuente: por Anagrama


Este ambiente se refleja en el interior de la cafetería. Los colores exclusivos son el naranja (tradicional de los Países Bajos, que son famosos por la calidad de los productos lácteos) y el azul (asociado con la frescura). Las líneas redondeadas y la tipografía lacónica limpia recuerdan los años 60. El logotipo también está hecho en el mismo estilo: la marca está colocada en un rombo con bordes redondeados.


La identidad cubre el número máximo de puntos de contacto con los clientes: letrero, interior (hasta etiquetas de plástico con los nombres de los helados), uniformes de los empleados y embalaje de productos.


Fuente: por Anagrama





 
 
 

Comments


Formulario de suscripción

¡Gracias por tu mensaje!

©2020 por 4eco. Creada con Wix.com

bottom of page